Parque Turístico Río Canímar: Invitación al disfrute

Este Robin Hood lanza el dardo directo a la diana.

La pelota gigante ofrece incalculable diversión... a espectadores.

Fotos: Abel López Montes de Oca
Para numerosas personas el Parque Turístico Río Canímar es algo así como un paraíso terrenal por la belleza extraordinaria de su flora y fauna, unido al disfrute de diversas opciones recreativas para el más exigente gusto.
Es un lugar agradable, propio para una excursión familiar, donde el contacto directo con la Naturaleza deviene alegría, esparcimiento y salud para niños, jóvenes y adultos. Resulta lo más propicio para quienes aman la práctica del ecoturismo sostenible.
Situado en las afueras de la ciudad de Matanzas, la instalación con exuberantes plantas preciosas, ornamentales y frutales, ofrece al visitante el encanto de su río Canímar, de aguas limpias y cristalinas; escasa profundidad y, al alcance de todos, los manantiales potables.
Baños refrescantes, viajes en lanchas, kayak y botes, así como un moderno parque recreativo inflable, con diversos medios, incluye estas posibilidades, informó Caridad Enríquez Fernández, subdirectora del Grupo Empresarial de Campismo Popular, y máxima autoridad en la referida instalación.
En las pelotas gigantes transportadoras, infladas con aire al momento, la diversión consiste en, desde adentro y si le es posible parado, hacerlas rodar sobre el agua, acción que asegurará mucha risa a granel… para el observador. 
Igual de divertidas son las pirámides, difíciles de escalar y de estacionarse sobre ellas. De lograrlo se llevará el aplauso de los demás y podrá lanzarse y deleitarse con un sabroso chapuzón.
El plátano, aisberg, canales y plataformas también permiten comprobar su equilibrio al instalarse en estos elementos plásticos disponibles para grandes y chicos durante la estancia.

Hay, asimismo, caballos, bien robustos, con galopar elegante, y monturas para realizar largos paseos por los alrededores, acompañados del guía. De igual manera cuentan con un hermoso toro negro (búfalo) convertido en la gran atracción.
A los émulos de Robin Hood lo esperan arcos y flechas, con el propósito de que, en un paraje como este, similar a los bosques de Sherwood, haga blanco en la diana.
Juego de argollas, voleibol, dominó y otras opciones recreativas usted encontrará, así como la posibilidad de conocer a la jutía Tina, capaz de aceptarle una cerveza o refresco, que ella le agradecerá para aliviar el calor.
El costo es módico, seis CUC por persona, de ellos cuatro para consumo de alimentos y bebidas, y el resto destinados al pago de la estancia, parque acuático inflable, juegos pasivos; turismo de sendero y visita a la casa del campesino. ¡Todo el día!
La alimentación es variada, desde comida criolla, con carne de cerdo asada hasta otras ofertas,  además de cerveza y  bebidas, incluido el apetecible mojito cubano.
A lo anterior se suman el canto de las aves que engalanan el sitio, y un paisaje inolvidable que de regreso a casa usted querrá llevarse para continuar viviendo esas emociones y belleza natural  en el Parque Turístico Río Canímar.
“El centro recauda millón y medio de CUC al año, y de ellos destina alrededor de un millón al mantenimiento de instalaciones del Campismo Popular del país, para mayor confort y disfrute del trabajador, familiares y pueblo en general”, informó Julio César Carmona Dager, director general de la Empresa.
Por último, desde ayer circula en esta ciudad de Matanzas el servicio de ómnibus desde esta ciudad hasta el Parque Turístico. Las horas de partida desde América, de Milanés a Contreras, son 9:00 de la mañana, 1:00 y 4:00 de la tarde. Y el regreso desde la instalación hasta la ciudad yumurina: 9:45 a.m., 1:45 y 4:45 p.m.